(PROBIDAD/IFEX) – El 12 de mayo de 2008 se realizó la audiencia judicial en contra de los tres acusados por el asesinato del periodista Salvador Sánchez Roque, suceso ocurrido en septiembre del 2007. El Tribunal Especializado de Sentencia de San Salvador condenó a 35 años de prisión a los jóvenes José Alfredo Hernández, José Luis […]
(PROBIDAD/IFEX) – El 12 de mayo de 2008 se realizó la audiencia judicial en contra de los tres acusados por el asesinato del periodista Salvador Sánchez Roque, suceso ocurrido en septiembre del 2007. El Tribunal Especializado de Sentencia de San Salvador condenó a 35 años de prisión a los jóvenes José Alfredo Hernández, José Luis Martínez Mejía y Héctor Adalberto Ortiz Mejía, todos integrantes de pandillas, por el delito de homicidio agravado. En el proceso judicial no se logró establecer cuales fueron los móviles del crimen.
Sánchez Roque fue asesinado la mañana del 20 de septiembre de 2007, al ir de su casa a una tienda de la vecindad a comprar productos alimenticios. Los tres sujetos que ahora han sido condenados lo interceptaron y luego de provocarle heridas con arma blanca, le dieron muerte con un arma de fuego. El periodista reporteaba para las radioemisoras Mi Gente, YSUCA y Maya Visión. Vivía en el populoso sector de Soyapango, al oriente de San Salvador, una zona de alta incidencia delincuencial.
La condena se logró gracias a las declaraciones de una testigo, cuya identidad fue protegida por la Fiscalía. Ella relató la forma en que se dieron los hechos, testimonio que junto a los exámenes forenses dieron base para que la policía iniciara la persecución de los acusados, los cuales fueron capturados uno a uno durante estos meses. El último en ser apresado, el pasado 21 de abril, fue Ortiz Mejía.
La fiscal Raquel Altagracia Campos, quien estuvo a cargo de la investigación, declaró que no lograron establecer el móvil del crimen. Señaló que los parientes de Sánchez Roque advirtieron que éste había recibido amenazas, pero las mismas no fueron tramitadas ante las autoridades. Luego de la muerte del periodista, su madre dijo a medios de prensa que el trabajo de su hijo era denunciar las injusticias y que se mantenía muy pendiente de las extorsiones al transporte público que las pandillas realizan en la zona. A pesar de esto, no se logró determinar que Sánchez Roque haya sido asesinado por su labor como comunicador social.
En reacción a la conclusión del proceso judicial, María Silvia Guillen, directora de la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho, un organismo de derechos humanos, señaló su inconformidad con la actuación de la Fiscalía en este caso. «De un tiempo para acá la labor de la Fiscalía se limita a atribuir la responsabilidad en las pandillas y el caso termina cuando una persona declara como testigo, sin investigar las causas de los asesinatos», dijo. Agregó que el patrón que siguió el asesinato de Sánchez Roque corresponde con el de al menos otros nueve casos de activistas sociales asesinados desde 2006, en los que la Fiscalía no ha investigado los móviles.
Actualiza el caso Sánchez Roque: http://ifex.org/es/content/view/full/86940