(FLIP/IFEX) – El paramilitar desmovilizado Pablo Emilio Quintero Dodino, alias «Bedoya», confesó su participación como autor material en el asesinato del periodista José Emeterio Rivas Rivas. El crimen ocurrió la noche del 6 de abril de 2003, en Barrancabermeja, Santander, al oriente del país. Así lo manifestó en versión libre rendida recientemente ante un juez […]
(FLIP/IFEX) – El paramilitar desmovilizado Pablo Emilio Quintero Dodino, alias «Bedoya», confesó su participación como autor material en el asesinato del periodista José Emeterio Rivas Rivas. El crimen ocurrió la noche del 6 de abril de 2003, en Barrancabermeja, Santander, al oriente del país. Así lo manifestó en versión libre rendida recientemente ante un juez de la Unidad de Justicia y Paz de la Fiscalía, en Medellín, Antioquia.
«Bedoya» aseguró que el asesinato correspondió a una orden de «Felipe Candado», uno de los altos mandos del «Bloque Central Bolívar» (BCB) de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), que en esa época tenía el control de la zona. «La advertencia 20 días antes (hecha por ‘Candado’) era que había que matarlo», aseguró el desmovilizado. Se dice que «Felipe Candado» falleció en un accidente en 2004.
Una fuente cercana a la FLIP en el departamento reprochó que se acuse como autor intelectual a una persona muerta. Para algunos periodistas en la región el responsable sería otro de los comandantes del BCB, desmovilizado actualmente.
Rivas Rivas era un locutor reconocido en la región por su trabajo en la emisora Calor Estéreo de Barrancabermeja. El medio venía haciendo fuertes críticas en contra de la alcaldía local, luego de denunciar irregularidades en el manejo de los recursos públicos del municipio. Tenía 44 años y era padre de dos hijos.
La investigación del asesinato había señalado al ex alcalde de la ciudad, Julio César Ardila Torres, como presunto autor intelectual. Posteriormente, le fue revocada la medida de aseguramiento pero aún continúa vinculado a la investigación.
Este es el tercer caso en que un paramilitar desmovilizado o preso admite el homicidio de un periodista en el marco de la Ley de Justicia y Paz. El primero fue en julio de 2006, cuando Andrés Darío Cervantes, alias «El Chiche», confesó el asesinato de Efraín Varela, director de la emisora Meridiano 70, en Arauca. Varela fue ejecutado el 28 de junio de 2002 (ver las alertas de IFEX del 7 de junio de 2007, 3 y 2 de julio de 2002).
En mayo de 2007, el líder desmovilizado Juan Francisco Prada Márquez, alias «Juancho Prada», confesó haber sido el autor material del crimen de Martín La Rotta Duarte, el 7 de febrero de 2004. La Rotta era el director de la emisora La Palma Estéreo, en el municipio de San Alberto, Cesar (ver las alertas del 7 de junio y 25 de mayo de 2007 y 30 de mayo de 2005; anotar que en alertas anteriores el apellido del periodista a veces se escribió «Larrota Duarte»).
La FLIP reconoce este nuevo paso contra la impunidad en el asesinato de Rivas Rivas, y hace un llamado a la justicia colombiana para que esclarezca la verdadera identidad de los autores intelectuales.
Favor de mandar copias de sus apelaciones al originador donde sea posible.