(CERIGUA/IFEX) – El 24 de mayo de 2006 el reportero del telenoticiero Guatevisión, Alberto Cardona, fue agredido brutalmente por siete agentes de la empresa se seguridad privada Sistemas Integrales de Seguridad, quienes lo empujaron salvajemente y le dieron de patadas, provocando fractura de varias costillas y de la nariz. Además le robaron una cámara fotográfica […]
(CERIGUA/IFEX) – El 24 de mayo de 2006 el reportero del telenoticiero Guatevisión, Alberto Cardona, fue agredido brutalmente por siete agentes de la empresa se seguridad privada Sistemas Integrales de Seguridad, quienes lo empujaron salvajemente y le dieron de patadas, provocando fractura de varias costillas y de la nariz. Además le robaron una cámara fotográfica digital y objetos personales de valor.
La agresión de Cardona se produjo, en horas de la noche del 24 de mayo, en las instalaciones del Estado del Ejército, ubicado en la zona 5 capitalina, cuando se disponía a abandonar el área destinada para la cobertura periodística, de un concierto brindado en el país, por el cantante reggaetonero, Daddy Yankee, cuando fue ultrajado por los guardias de seguridad privada.
Las graves lesiones sufridas por Cardona ameritaron su hospitalización, así como cirugías de nariz (ver las alertas de IFEX del 7 de junio y 30 de mayo de 2006).
La denuncia fue presentada ante el Ministerio Público, la Policía Nacional Civil (PNC) y en la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH).
El 18 de mayo, Mario René Escobedo, corresponsal de la sección «Así es Mi Huehue» del periódico regional «El Quetzalteco», fue agredido físicamente y verbalmente por Alejandro Rivas, oficial de la PNC de la Comisaría 43, de la cabecera departamental de Huehuetenango.
Rivas insultó y dio de empellones a Escobedo, cuando este tomaba fotografías de una escena de un crimen ocurrido en un céntrico sector de esa cabecera departamental.
A decir del periodista, Rivas intentó arrebatarle su grabadora reportera y la cámara fotográfica, y con improperios en contra de su persona le reclamó la publicación de una nota periodística en el que se señalaba que en la Comisaría 43 había un rótulo que anunciaba la venta de un arma de fuego. El agente también le amenazó que en caso de seguir con su publicaciones iba a tener nuevos problemas.
Este caso fue denunciado al Ministerio Público, la PNC y en la PDH, así como ante la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), de la cual es socio «El Quetzalteco».
Las agresiones en contra de trabajadores de la prensa se han intensificado en los últimos dos meses en Guatemala, por lo que el Observatorio de los Periodistas de CERIGUA se ha comunicado de inmediato con los agraviados, a fin de brindarles su solidaridad y para exigir la investigación de los hechos, que atentan contra la libertad de expresión y la vida de los trabajadores de la prensa.