(RSF/IFEX) – RSF está muy preocupada por la suerte de Vladimir Jara y Víctor Benítez, de le emisora de radio Chaco Boreal, que están siendo objeto de amenazas y escuchas telefónicas salvajes tras revelar unos casos de corrupción en la Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD). La organización pide a la justicia que abra una investigación, administrativa […]
(RSF/IFEX) – RSF está muy preocupada por la suerte de Vladimir Jara y Víctor Benítez, de le emisora de radio Chaco Boreal, que están siendo objeto de amenazas y escuchas telefónicas salvajes tras revelar unos casos de corrupción en la Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD). La organización pide a la justicia que abra una investigación, administrativa y penal a la vez, sobre el caso.
«Los casos de corrupción y narcotráfico exponen a los periodistas a graves riesgos. Reporteros sin Fronteras recuerda, a este respecto, que todavía no se ha aclarado la desaparición, hace año y medio, del periodista Enrique Galeano, que investigaba ese tipo de asuntos. En este caso, las amenazas y escuchas telefónicas de Vladimir Jara y Víctor Benítez ponen de manifiesto graves abusos de poder, que revelan reales disfunciones en la administración. La justicia no puede dejar impunes esos procedimientos», ha declarado la organización.
El 13 de junio de 2007, Vladimir Jara declaró en la Fiscalía General del Estado haber sido amenazado de muerte por agentes de la SENAD. También declaró que han interceptado sus teléfonos, tanto el móvil como el fijo. Según él, se trataría de represalias por algunos comentarios en antena de su colega Víctor Benítez, relativos a actuaciones de corrupción constatadas en la SENAD. También están siendo objeto de escuchas salvajes las líneas telefónicas de este último.
Poco antes de los hechos, Víctor Benítez consultó a su colega, que está muy al tanto del funcionamiento de la administración antidroga. Tras esa llamada telefónica, una funcionaria de la SENAD regañó severamente a Vladimir Jara, indicándole que sería mejor que defendiera a la institución, dado que proporciona regularmente publicidad oficial a su emisora de radio. Después, el periodista recibió otros mensajes en su teléfono móvil, o en su correo electrónico, dándole orden de «callarse». El mismo día, la SENAD anuló el auspicio destinado a su programa.
La prensa paraguaya sigue afectada por el trauma que causó la desaparición, el 4 de febrero de 2006 en el Departamento de Concepción (Centro), de Enrique Galeano, de la emisora local Radio Azotey (cf. comunicado del 4 de febrero de 2007). Poco antes, el periodista había descubierto las sospechosas concomitancias existentes entre algunas autoridades locales y un cartel brasileño. A pesar de las promesas del Presidente de la República, Nicanor Duarte Frutos, todavía no se ha aclarado su desaparición (ver las alertas de IFEX del 9 y 2 de febrero de 2007, 16 de noviembre, 26 y 10 de octubre, 31 y 8 de marzo y 14 de febrero de 2006).