Guillermo Zuloaga, uno de los mayores accionistas de Globovisión, planta televisiva privada que opera en Caracas, admitió que por razones políticas, económicas y jurídicas que hacen económicamente insostenible, se estaría haciendo la negociación del canal.
El 11 de marzo de 2013, Guillermo Zuloaga, uno de los mayores accionistas de Globovisión, planta televisiva privada que opera en Caracas, Distrito Capital, anunció que el canal tiene “una oferta formal de compra”, lo cual implica la venta a un nuevo accionista. Admitió que por razones políticas, económicas y jurídicas que hacen económicamente insostenible, se estaría haciendo la negociación del canal, que según informó, se concretará después del 14 de abril, luego de las elecciones presidenciales, que se realizarán tras el fallecimiento del Presidente Hugo Chávez.
En una carta enviada a los trabajadores del canal, Guillermo Zuloaga afirmó que se vio obligado a aceptar la propuesta de compra que le presentó Juan Domingo Cordero, inversionista y representante de negocios del sector bancario privado del país.
Justificó esta acción al señalar: “Somos inviable económicamente, porque nuestros ingresos ya no cubren nuestras necesidades de caja. Ni siquiera podemos subir los sueldos lo suficiente para compensar la inflación y mucho menos para compensar la devaluación. Somos inviables políticamente, porque estamos en un país totalmente polarizado y del lado contrario de un gobierno todopoderoso que quiere vernos fracasar. Somos inviables jurídicamente porque tenemos una concesión que termina y no hay actitud de renovárnosla”.
Zuloaga, también, señaló que por las discordancias y las amenazas emitidas desde el gobierno nacional él coloca en duda que la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) -organismo encargado de regular el espectro radioeléctrico del país y ente adscrito a la Vicepresidencia de la República- renueve la concesión al canal que le permite operar en señal abierta Caracas y otros estados de la región central del país, luego del vencimiento de la misma, que será en el año 2015.
Zuloaga afirmó, además: “estamos acosados por las instituciones del Estado, apoyadas en un TSJ (Tribunal Supremo de Justicia, máximo órganos poder judicial) cómplice que las ayuda y colabora en todo aquello que nos pueda perjudicar”.
Intereses político-partidistas
A la par, Guillermo Zuloaga admitió que la conducción de esta empresa televisiva se inclinó hacia el sector político opositor, en el proceso de elecciones presidenciales del 8 de octubre de 2012, en las que resultó electo el Presidente Hugo Chávez: “tomé la decisión de hacer todo lo que estuviera en nuestro poder, a riesgo del capital de los accionistas y conscientes de las implicaciones que esta actitud podría traer, para lograr que la oposición ganara las elecciones de octubre. Era la oportunidad, como venezolanos, para recuperar nuestro país. En Globovisión lo hicimos extraordinariamente bien y casi lo logramos, pero la oposición perdió”.
La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela en sus artículos 57 y 58 garantiza el derecho a la libertad de expresión y establece que la información debe ser plural e imparcial.
Cualquier acción o presión directa o indirecta, auspiciada por actores estatales o por particulares (gobiernos o empresas privadas), que afecte los principios de pluralidad e imparcialidad o pretenda silenciar ideas y opiniones son contrarios a la libertad de expresión y al derecho a la información.
Coyuntura electoral
El anuncio de la negociación del canal se realizó 6 días después que ocurriera el fallecimiento del Presidente Hugo Chávez, y luego de 2 días de que el Consejo Nacional Electoral (poder electoral) informara que las elecciones presidenciales se realizarán el 14 de abril de 2013, en las cuales se medirán por el sector oficialista Nicolás Maduro, quien fue juramentado por el poder legislativo como Presidente encargado; Henrique Capriles Randonski, con el respaldo de las fuerzas opositoras agrupadas en la Mesa de la Unidad Democrática; y otros 3 candidatos.
A pesar de que diversos periodistas del canal han manifestado que este medio seguirá realizando su labor informativa manteniendo una línea crítica que ha caracterizado a Globovisión, la posibilidad de venta del canal puede generar incertidumbre sobre el ejercicio independiente y plural de Globovisión -único canal dedicado, en su mayoría, a contenidos informativos del país- durante los próximas semanas, las cuales estarán dedicadas a la coyuntura electoral que vive el país.