Las radios comunitarias, consideradas por las autoridades y las redes de telecomunicación como “piratas”, se encuentran en una situación de gran vulnerabilidad en Guatemala.
Este artículo fue publicado originalmente en rsf.org el 26 de marzo de 2015.
El 20 de marzo pasado el alcalde del municipio de Santa Eulalia, ubicado en el departamento de Huehuetenango (oeste), impidió de forma violenta la reapertura de la radio comunitaria Snuq Jolom Konob. La organización Reporteros sin Fronteras (RSF) se encuentra alarmada por la represión que padecen los medios de comunicación comunitarios en el país.
Los directores de la radio Snuq Jolom Konob (autóctonos), cerrada por el acalde desde hace dos meses, quisieron organizar el 20 de marzo una ceremonia de reapertura de sus instalaciones. No obstante, el alcalde y sus partidarios lo impidieron. Estos insultaron, intimidaron y agredieron a miembros de la comunidad y a periodistas que se encontraban presentes, informó Lucía Ixchíu, periodista de Prensa Comunitaria, quien precisó que algunos de los agresores estaban armados.
“Reporteros sin Fronteras se encuentra alarmada por la violencia de las autoridades locales de Santa Eulalia y de sus seguidores contra la radio Snuq Jolom Konob. Desafortunadamente, este acontecimiento es representativo de la actitud hostil de las autoridades guatemaltecas frente a los medios de comunicación y, en particular, a las radios comunitarias”, señaló Claire San Filippo, responsable del Despacho Américas de nuestra organización. “RSF pide que los presuntos responsables de esta violencia rindan cuentas ante la justicia y que cese la impunidad”, añadió.
La radio Snuq Jolom Konob ha cubierto los conflictos relacionados con la instalación de la empresa hidroeléctrica Hidro Santa Cruz en una zona donde habitan comunidades autóctonas maya, akateko, chuj, popti’ y q’anjob’al, principalmente. La cobertura mediática de la defensa de un territorio ancestral de los pueblos autóctonos generó malestar entre las autoridades locales que favorecieron la instalación de la empresa.
Las radios comunitarias llevan a cabo un trabajo informativo muy importante en Guatemala, sobre todo en las regiones rurales o de población autóctona, pues difunden una información accesible anclada en los problemas locales. Sin embargo, la legislación en vigor no favorece a los medios de comunicación asociativos, ésta beneficia a los medios de comunicación establecidos, en particular tras la reforma de la Ley General de Telecomunicaciones, promulgada en 2012.
Ésta consolidó la fuerte concentración del paisaje mediático guatemalteco. La ley permitió a los medios de comunicación que ya poseían una concesión de frecuencia, ampliar los títulos de usufructo (obtener su renovación) de forma casi automática por un plazo de veinte años, y omitió regularizar la situación de los medios de comunicación comunitarios, quienes se ven en la
imposibilidad de obtener frecuencias legales. De esta manera, las radios comunitarias, consideradas por las autoridades y las redes de telecomunicación como “piratas”, se encuentran en una situación de gran vulnerabilidad y corren el riesgo de ser cerradas en cualquier momento o de que se confisque su equipo.
Usted puede apoyar la reapertura de la radio de Santa Eulalia firmando esta petición.
Guatemala se encuentra en el lugar 129, entre 180 países, en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2015 de Reporteros sin Fronteras.