(RSF/IFEX) – RSF condena las prácticas de acoso a que se ve sometida la prensa reformista. La más reciente, y sin duda la más ridícula, se refiere a la suspensión del diario «Yas-e no», al que se le prohibió aparecer durante diez días a partir del 29 de septiembre de 2003 por haberse negado a […]
(RSF/IFEX) – RSF condena las prácticas de acoso a que se ve sometida la prensa reformista. La más reciente, y sin duda la más ridícula, se refiere a la suspensión del diario «Yas-e no», al que se le prohibió aparecer durante diez días a partir del 29 de septiembre de 2003 por haberse negado a publicar, por segunda vez, el derecho de réplica del fiscal de Teherán, Said Mortazavi. El diario, que a final cedió a las exigencias del fiscal, ha conseguido autorización para reaparecer a partir del 1 de octubre.
«Este nuevo caso parecería una farsa si no se inscribiera en un clima alarmante para la libertad de prensa en Irán. La justicia iraní, en manos de los conservadores, no contenta con citar sin cesar a los periodistas, cerrar periódicos y falsear algunas investigaciones, como la de la muerte de la fotógrafa Zahra Kazemi, ahora utiliza la práctica del derecho de réplica para monopolizar los espacios de expresión en la prensa reformista», ha declarado Robert Ménard, secretario general de RSF. En efecto, Mortazavi, fiscal de Teherán y ex juez de prensa, ha cerrado el diario «Yas-e no» tras ejercer el derecho de réplica, permitido por el artículo 23 de la ley de prensa, que establece que el periódico que recibe una respuesta a un artículo tiene que publicarla, mencionando el título del artículo inicial, en la misma sección que el artículo citado y en su totalidad, a condición de que el derecho de réplica no sea dos veces más largo que el artículo inicial. El fiscal dirigió varias respuestas a unos artículos de «Yas-e no», relativas entre otras cosas al caso de Kazemi y a las condiciones de detención de Abbas Abdi, periodista encarcelado desde hace varios meses (ver las alertas de IFEX del 1 de agosto, 24 de junio, 30 y 23 de abril, 13 de marzo y 8 de enero de 2003, 28 y 6 de noviembre de 2002). La última carta enviada, de una decena de páginas (de las dieciséis del diario) se publicó, con algunos cortes, en la edición del 27 de septiembre. Considerando que estaba incompleta y demasiado cerca de unos artículos que daban cuenta de la huelga de hambre de Abdi, el fiscal pidió que volviera a publicarse íntegramente en la edición del día siguiente, en la primera página del periódico; a lo que se negó la redacción de «Yas-e no», y que le ha costado la suspensión.
Por otra parte, el tribunal revolucionario de Teherán condenó el 28 de septiembre a tres años de cárcel con suspensión de condena, por «atentado a la seguridad del Estado» y «propaganda contra el régimen», a Fariba Davoudi Mohajer, una periodista colaboradora de la prensa reformista, tanto por sus escritos como por haber firmado una petición para liberar a algunos presos.
La semana pasada, Eskandar Deldam, periodista del semanario «Tabarestan», hoy suspendido, recibió una citación de la sexta sección de los servicios del fiscal, tras un artículo satírico sobre la radio-televisión estatal, que depende directamente del Guía de la República Islámica Alí Jamenei.
El 27 de septiembre, el tribunal revolucionario de Teherán condenó a un año de prisión incondicional a Mohsen Sazgara, director del sitio Alliran y del diario reformista «Jameh» (cerrado), acusándole de «atentado a la seguridad nacional, insultos al Guía de la República y propaganda contra el Estado». Su abogado manifestó que el juicio se celebró a puerta cerrada, y que el tribunal no precisó a cual de las acusaciones corresponde la sentencia.