(RSF/IFEX) – RSF está vivamente preocupada por el repentino encarcelamiento, el 15 de abril de 2004, de Anas Tadili, director del semanario «Akhbar al-Ousbouaá», oficialmente por un asunto de derecho común, de hace 10 años. La organización teme que en realidad se trate de un asunto de prensa, y que el encarcelamiento del periodista sea […]
(RSF/IFEX) – RSF está vivamente preocupada por el repentino encarcelamiento, el 15 de abril de 2004, de Anas Tadili, director del semanario «Akhbar al-Ousbouaá», oficialmente por un asunto de derecho común, de hace 10 años. La organización teme que en realidad se trate de un asunto de prensa, y que el encarcelamiento del periodista sea el resultado de presiones políticas.
En efecto, el 9 de abril «Akhbar al-Ousbouaá» publicó un artículo sobre la presunta homosexualidad de un miembro del gobierno. El artículo se refería, sin nombrarle, al Ministro de Finanzas. El ministro habría presionado al Ministro de Justicia, para encarcelar al periodista.
«Estamos confusos por los azares del calendario. Hace una semana encarcelaban a Anas Tadili, después de haberle citado, en plena noche, en la comisaría Rabat, por un asunto de derecho común, que se remonta a 1994. Teniendo en cuenta la imposibilidad para el periodista de conseguir inmediatamente 3 millones de dirhams (aproximadamente 325,000 USD; 270,000 euros), se pronunció contra él una ejecución de sentencia. Y un hecho bastante sospechoso es que todo ello ha ocurrido solamente pocos días después de la aparición de un artículo, que cuestionaba las costumbres de un ministro. Nos tememos que el encarcelamiento sea de hecho el resultado de presiones políticas, para evitar la presentación de una querella por difamación. Si se trata de un asunto de prensa, como todas las partes parecen reconocer, pedimos que a Anas Tadili se le juzgue en función del código de prensa, y que pague una multa, en el caso de que la justicia le reconozca culpable de difamación. Incluso admitiendo que cualquier atentado a la vida privada es criticable, desde un punto de vista deontológico, esperamos la mayor transparencia en la aplicación de la regla de derecho», ha manifestado la organización.
«Juzgamos inadmisible estos abusos de poder. Si Anas Tadili cometió una infracción al código de prensa, debe juzgársele sobre esa base, en aplicación de la ley, y no por un asunto que data de 1994. El Ministro de Finanzas intenta simplemente arreglar sus cuentas con el periodista, evitando tener que plantear una querella por difamación, que es el fundamento de este caso. Estas prácticas son inadmisibles. Y resulta muy peligrosa la falta total de apoyo del Sindicato de Periodistas, que no parece tener nada que decir en este procedimiento», ha declarado el abogado de Tadili a RSF.
El 9 de abril, el periódico de Tadili publicaba «Homosexualidad y clase política en Marruecos», explayándose sobre las aventuras homosexuales de un ministro, en una estación balnearia del norte de Marruecos. El artículo se refería, sin nombrarle, al Ministro de Finanzas.
El 15 de abril, a las 10 de la noche (hora local), la policía judicial de Rabat citó a Tadili. Le urgieron que pagara una multa de 3 millones de dirhams. El periodista fue condenado en 1994, por haber incumplido el control de cambios, abriendo una cuenta bancaria en el extranjero. Condenado a 6 meses de cárcel, con la condena en suspenso, y al pago de una multa de 3 millones de dirhams, el periodista recurrió en apelación y en casación. La sentencia, dictada en 2001, confirmaba el veredicto de primera instancia. Como nunca pagó esa suma, se decidió súbitamente la ejecución de la sentencia el 15 de abril, sin posibilidad de recurso. Posteriormente encarcelaron al periodista en la prisión de Salé.
El diario «Le Matin», cercano al poder, contaba en su edición del 18 de abril: «El alto responsable cuyo ‘honor se arrojó a los perros’ ha optado por reaccionar. Se entrevistó ampliamente con el primer Ministro. En el centro de la conversación, la deriva de la prensa y sobre todo la preparación de una reacción. (…) (el Ministro de Finanzas) quiere obtener reparación del Ministro de Justicia, y convence al jefe del ejecutivo. Driss Jettou habla con el Ministro de Justicia, Mohamed Bouzoubaa, pidiéndole que se dirija a la fiscalía para que abra una investigación sobre el autor del artículo, y el director responsable del periódico. El jueves por la noche, la policía judicial de Rabat cita al director del tabloide».
Por otra parte, el 19 de abril, Tadili declaró ante el fiscal del rey del tribunal de Rabat, en una investigación abierta por orden del Primer Ministro, Driss Jettou, habilitado por ley para iniciar diligencias judiciales, cuando se trata de atentados al honor de un miembro del gobierno.