La redada al "Chernovik" forma parte de la investigación al periodista Abdulmumin Gadzhiev, que fue inicialmente acusado de "financiar el terrorismo" y posteriormente, ante la ausencia de pruebas, de "incitar al terrorismo".
Este artículo fue publicado originalmente en rsf.org el 2 de octubre de 2019.
Pero este último cargo ha perdido fundamento cuando expertos policiales concluyeron en un informe que una entrevista de 2013 inicialmente empleada para la acusación no tenía ninguna prueba que apoyara dichos cargos.
«Todo indica a que los servicios de seguridad están haciendo todo lo posible para rescatar una investigación que había llegado al colapso», afirma Johann Bihr, responsable de la oficina de Europa del Este y Asia Central de Reporteros sin Fronteras.
«Esta redada ha puesto seriamente en riesgo la confidencialidad de las fuentes del Chernovik y su capacidad para llevar a cabo investigaciones sobre temas sensibles. También manda un mensaje a todos los demás medios que han apoyado a Abdulmumin Gadzhiev. Las autoridades federales y locales deben anunciar inmediatamente el fin de esta caza de brujas inaceptable», añade.
Chernovik es uno de los periódicos más populares en Daquestán, a menudo blanco de acoso por parte de las autoridades. Fue acusado de convivencia con el terrorismo durante tres años, hasta 2011, cuando fue finalmente absuelto. Su fundador, Khadzhimurad Kamalov fue asesinado después de unos meses.
Rusia ocupa el puesto 149 de los 180 países que conforman la actual Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa elaborada anualmente por Reporteros sin Fronteras.