Una periodista dijo que la agresión ocurrió a pocos metros de un contingente de la Guardia Nacional Bolivariana, con vista del punto donde ocurrió el suceso, pero ningún funcionario hizo absolutamente nada para detener o dispersar la agresión.
El 26 de abril de 2014, cuatro trabajadores de El Nacional, diario de capital privado y de circulación nacional, fueron agredidos en las inmediaciones de la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV), específicamente en la estación de gasolina ubicada en la esquina a un lado de la UBV, en la Urbanización Los Chaguaramos de la ciudad de Caracas, capital del país. El hecho ocurrió poco antes de las 11 de la mañana.
La periodista Maru Morales informó a IPYS Venezuela que un equipo reporteril, conformado por su persona, la periodista Maolis Castro, y los reporteros gráficos Omar Veliz y William Dumont, fue agredido por varios hombres vestidos de civil que atacaron el vehículo en el que se desplazaban los 4 trabajadores de la prensa. Con ellos, también se encontraba el conductor Francisco Zambrano.
Alrededor de las 10:50 am, el equipo reporteril se ubicó en las inmediaciones de la UBV para cubrir una concentración estudiantil que se reuniría en ese punto. Cuando los reporteros se percataron que no había nadie en el lugar, una transeúnte les dijo que el lugar de la concentración había sido cambiado para Ciudad Banesco, razón por la que abordaron el vehículo y trataron de dar la vuelta en la Estación de Gasolina PDV, ubicada en ese lugar.
En ese momento varios hombres vestidos de civil se acercaron de forma agresiva al vehículo, y a la vista de todos los transeúntes, golpearon la carrocería y exigieron a gritos que les fueran entregados “los rollos” de las cámaras fotográficas e, incluso, intentaron arrebatarle su equipo de trabajo al fotógrafo William Dumont.
Morales recordó que a pesar de que ninguno de los reporteros o el vehículo tenían visible la identificación del diario, uno de los sujetos indicó al resto: “¡Métele, métele, que son de El Nacional”. Otro de los hombres abrió la puerta trasera del carro y le mostró el arma de fuego que llevaba en el cinto del pantalón, al fotógrafo Véliz, al tiempo que le pedía su cámara.
A Dumont lograron despojarlo de la tarjeta de memoria de su cámara fotográfica. Uno de los hombres lo golpeó fuertemente en el rostro dos veces y le rompió en la boca. Luego, otro de los sujetos rompió con un objeto contundente el vidrio trasero del automóvil.
La periodista aseguró que la agresión ocurrió a pocos metros de un contingente de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y Guardia del Pueblo. Dijo que los militares estaban apostados con equipos antimotines dentro de la Universidad Bolivariana de Venezuela, con vista del punto donde ocurrió el suceso, pero ningún funcionario hizo absolutamente nada para detener o dispersar la agresión.
Luego el vehículo que trasladaba al equipo reporteril se desplazó en dirección a Bello Monte a la altura de Ciudad Banesco, desde donde partiría una marcha que debían cubrir. Al llegar al semáforo ubicado en la fachada oeste de Banesco, dos funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), con armas en mano, detuvieron el carro. Los policías ordenaron al chofer y al reportero gráfico William Dumont bajarse del vehículo. Para ese entonces, Morales, Castro y Véliz se habían bajado segundos antes con las manos en alto. Cuando todos los reporteros se identificaron, los policías les explicaron que una señora denunció que los ocupantes del vehículo se habían robado unas cámaras fotográficas.
Pese a que los reporteros relataron a los PNB que minutos antes, a escasas cuadras, habían sido víctimas de robo y agresión, los funcionarios se retiraron del sitio sin tomar la respectiva denuncia.