Lo que sigue es un extracto de un blog de CPJ del 9 de agosto de 2018 por John Otis, corresponsal del CPJ para la región andina. El alzamiento popular que se inició hace cuatro meses en Nicaragua no solamente ha debilitado el poder del presidente Daniel Ortega: ha erosionado el control de su Gobierno […]
Lo que sigue es un extracto de un blog de CPJ del 9 de agosto de 2018 por John Otis, corresponsal del CPJ para la región andina.
El alzamiento popular que se inició hace cuatro meses en Nicaragua no solamente ha debilitado el poder del presidente Daniel Ortega: ha erosionado el control de su Gobierno sobre las noticias.
Hasta hace poco, según analistas entrevistados por el CPJ, la mayoría de las organizaciones noticiosas nicaragüenses apoyaban a Ortega o brindaban un tratamiento informativo relativamente benigno a su régimen cada vez más autoritario. Sin embargo, a raíz de una violenta campaña represiva contra manifestantes que ha arrojado un saldo de, como mínimo, unas 300 víctimas mortales, una cantidad mayor de medios de prensa está ofreciendo contundentes reportajes sobre los abusos del Gobierno y algunos incluso se han sumado a los llamados a favor de la renuncia de Ortega.
«El monopolio del Gobierno sobre la información se ha desplomado», declaró al CPJ Carlos Fernando Chamorro, director del sitio noticioso independiente Confidencial. «Los medios independientes se están fortaleciendo».
Esta posición más combativa ocurre en momentos en que se incrementan los peligros para los periodistas. Un periodista fue muerto en abril y muchos otros han declarado al CPJ que han recibido golpizas, han sido blanco de los disparos de francotiradores, o paramilitares partidarios de Ortega les han robado el equipo de trabajo. En julio, varios periodistas quedaron atrapados toda una noche en una iglesia de Managua ocupada por estudiantes que participaban en las protestas y que fueron atacados por fuerzas gubernamentales.