El periodista hondureño Igor Padilla, murió en un atentado criminal en la ciudad de San Pedro Sula, informaron diferentes medios de comunicación. Colegas de Padilla habían sido amenazados al principio de enero.
Este artículo fue publicado originalmente en clibrehonduras.com el 17 de enero de 2017.
El periodista hondureño Igor Padilla, murió en un atentado criminal en la ciudad de San Pedro Sula, informaron diferentes medios de comunicación.
Según informes de prensa, el corresponsal del Canal de Televisión Hable Como Habla, falleció de varios impactos de bala que le infirieron sus atacantes.
El numeral 9 de la Declaración de Principios Sobre Libertad de Expresión –que forma parte de la normativa interna hondureña- estípula que el asesinato, secuestro, intimidación, amenaza a los comunicadores sociales, así como la destrucción material de los medios de comunicación, viola los derechos fundamentales de las personas y coarta severamente la libertad de expresión. Es deber de los Estados prevenir e investigar estos hechos, sancionar a sus autores y asegurar a las víctimas una reparación adecuada.
Padilla fue declarado muerto, en una clínica cercana al lugar de los hechos, hasta donde fue trasladado en un intento por salvarle la vida.
El comunicador llego sin vida a la clínica, confirmó el médico Arturo Bendaña en escuetas declaraciones a la prensa.
Padilla era el productor de un programa humorístico denominado “Los Verduleros” que se transmite los fines de semana por HCH. También fue el productor de una película además fue el productor de la película “Chinche man”.
Versiones de prensa indican que los atacantes de Padilla, le hicieron alrededor de 25 disparos de arma de fuego.
Colegas de Padilla habían sido amenazados
El pasado 4 de enero de 2017, C-Libre publicó una alerta en la que dos periodistas del canal de Televisión Hable Como Habla (HCH), fueron amenazados a través de la red social Facebook, desde un perfil de una persona identificada como “Jowe Agular”.
Los periodistas amenazados son el periodista Ernesto Alonso Rojas y Suly Cálix, compañeros del periodista asesinado, en la ciudad de San Pedro Sula. Las amenazas eran posibles represalias si el periodista propietario del canal no despide a la también periodista Elsa Oseguera.
“Don Eduardo…le doy un mes para que despida a esa manera de la ms Elsa Oseguera sino le voy a matar a Suliz o a Ernesto”, dice el mensaje plagado de errores de ortografía, publicado el día 4 de enero.
Según HCH, “la periodista Elsa Osegurea, negó estar vinculada con algún grupo criminal y aseguró que no siente temor ante las amenazas, ya que mediante una investigación exhaustiva se podría dar con el paradero del individuo”.
Oseguera ha recibido amenazas directas en otra oportunidad lo que había obligado al propietario del medio a trasladarla a Tegucigalpa.