El gobierno de Tanzania prohibió ocho revistas y suspendió tres periódicos tabloides supuestamente por publicar fotografías indecentes, lo que promueve la promiscuidad y en consecuencia se opone a las campañas anti-VIH-SIDA, informan el Media Institute of Southern Africa (Instituto de los Medios de Comunicación del África Austral, MISA) y Reporteros sin Fronteras (RSF). El 24 […]
El gobierno de Tanzania prohibió ocho revistas y suspendió tres periódicos tabloides supuestamente por publicar fotografías indecentes, lo que promueve la promiscuidad y en consecuencia se opone a las campañas anti-VIH-SIDA, informan el Media Institute of Southern Africa (Instituto de los Medios de Comunicación del África Austral, MISA) y Reporteros sin Fronteras (RSF).
El 24 de julio el ministro de Información Omar Ramadhani Mapuri anunció la prohibición de las revistas «Mama Huruma», «Tafrani», «Chachandu», «Mizengwe», «Kula Vitu», «Penzi Kikohozi», «Uroda kwa Foleni» y «Simulizi Kutoka Chumbani», informa RSF. También se suspendió los periódicos «Cheko» y «Zungu» por seis meses y «Kombora» por un año. El ministro acusó a las publicaciones en idioma Swahili de ser contrarias a la ética nacional y alentar la conducta promiscua al publicar imágenes de mujeres semidesnudas, informa MISA.
MISA-Tanzania, la Association of Journalists and Media Workers (Asociación de Periodistas y Trabajadores de los Medios, AJM) y el Tanzania Union of Journalists (Sindicato de Periodistas de Tanzania, TUJ) criticaron la prohibición del Gobierno, diciendo que era arbitraria e injustificada, según un informe de la Associated Press (AP). RSF señala que la medida no tiene precedentes desde la reciente proliferación de la prensa privada.
Para obtener más información, vea
www.misanet.org y
www.rsf.fr.
Las acciones en contra de las publicaciones coinciden con una campaña antipornográfica recientemente anunciada en Tanzania. La British Broadcasting Corporation informó el 26 de junio que el presidente Benjamin Mkapa inició una ofensiva contra la pornografía, incluyendo Internet. La ofensiva se produce en respuesta a la presión de las iglesias, que están preocupadas por los efectos de la pornografía en la moral de los jóvenes.