Aunque el número registrados de infracciones contra los periodistas cometidas por la Autoridad Nacional de Palestina (PNA) ha disminuido levemente en 1999, el grado de autocensura que los periodistas palestinos se ven obligados a ejercer se ha elevado enormemente, según documenta el Palestinian Human Rights Monitoring Group (Grupo Palestino de Vigilancia de Derechos Humanos, PHRMG) […]
Aunque el número registrados de infracciones contra los periodistas cometidas por la Autoridad Nacional de Palestina (PNA) ha disminuido levemente en 1999, el grado de autocensura que los periodistas palestinos se ven obligados a ejercer se ha elevado enormemente, según documenta el Palestinian Human Rights Monitoring Group (Grupo Palestino de Vigilancia de Derechos Humanos, PHRMG) en un informe reciente de la libertad de prensa en Palestina. El PHRMG, una organizacion no gubernamental independiente, baso su informe en «Entrevistas con periodistas que trabajan en estaciones de radio y TV privadas, en diarios, en agencias de noticias extranjeras, y con la Oficina de Prensa y Publicaciones del Ministerio de Informacion». También utilizaron informacion de una amplia gama de artículos y talleres acerca de la libertad de prensa en Palestina.
El informe, titulado «Media in Palestine: Between the PNA’s Hammer and the Anvil of Self-Censorship» (Medios en Palestina: Entre la espada de la PNA y la pared de la censura) declara que en 1999 «dos tercios de las infracciones cometidas contra los periodistas palestinos ocurrieron en la franja de Gaza, a pesar del hecho que el número de periodistas y la cantidad de material impreso es mayor en Cisjordania». El PHRMG atribuye en parte esta elevada incidencia al grado de control que la PNA tiene sobre la franja de Gaza. El PHRMG señala además que su investigacion «establecio que la mayor parte de esas infracciones en las Áreas Autonomas han sido cometidas por los Servicios de Seguridad de Palestina».
Una de las formas más insidiosas de represion de los medios ha sido la autocensura, a la que los periodistas palestinos se enfrentan diariamente, dice el PHRMG. El informe dice que «la autocensura se considera más seria que la censura externa debido a que no solo impide al periodista publicar lo que ha escrito, sino además escribir, pensar o analizar». En ausencia de leyes palestinas que proporcionen pautas claras de lo que es aceptable que los periodistas escriban, el PHRMG informa que los periodistas deben navegar cuidadosamente alrededor de cualquier artículo acerca de la PNA o los organismos de seguridad palestinos.