El Foro de Periodismo Argentino manifiesta su preocupación y alarma por el incendio intencional del automóvil de Darío Zarco, director del diario Primera Línea, en de Resistencia. Zarco dijo que hace un tiempo viene investigando sobre la vinculación de policías locales con delincuentes de la zona sur de la ciudad.
El Foro de Periodismo Argentino (FOPEA) manifiesta su preocupación y alarma por el incendio intencional del automóvil de Darío Zarco, director del diario Primera Línea, en la ciudad de Resistencia (Pcia. de Chaco). El hecho se produjo en la tarde del jueves 12 de diciembre de 2013 en la puerta de la casa del periodista, que está ubicada en Villa Luzuriaga, al sur de la ciudad, zona en la que se produjeron los principales hechos de violencia y saqueos de los días pasados.
Los vecinos de Zarco vieron a dos individuos mientras rompían la luneta del vehículo (un Peugeot 405 color negro mate) y arrojaban en el interior un elemento incendiario. El fuego se extendió rápidamente y provocó daños importantes en el vehículo, aunque la acción inmediata de Zarco y sus vecinos permitió que se sofoque el fuego y evitar así que las llamas llegaran al tanque de combustible.
Al momento del ataque Zarco se encontraba en su casa con su hija de un año de edad. El periodista sufrió quemaduras leves en su brazo y hombro derechos, cuando abrió una de las puertas de su auto para extinguir el fuego que se extendía por el interior. Efectivos de la policía provincial arribaron a los pocos minutos e intentaron sin éxito encontrar a los autores del hecho.
Respecto de las posibles motivaciones del hecho, Zarco dijo a FOPEA que hace un tiempo viene investigando sobre la vinculación de policías locales con delincuentes de la zona sur de Resistencia. El martes último, en horas de la madrugada, Zarco estuvo cubriendo los episodios de violencia por los saqueos en la capital chaqueña y, particularmente, la actuación de la Policía. En un momento, un grupo de uniformados lo reprendió y le quitó el celular con el que intentaba sacar fotos de un procedimiento irregular en el que los policías habrían entrado en un domicilio sin orden judicial en plena madrugada.
Tal como informó el diario que dirige el periodista atacado, prefirió no adelantarse a hacer imputaciones, pero no descartó la posibilidad de que el ataque guardara relación con la investigación de organizaciones delictivas, más precisamente bandas mixtas vinculadas a delitos contra la propiedad y al negocio de las drogas que operan en la zona sur del área metropolitana.
FOPEA solicitó a las autoridades provinciales que garanticen la seguridad del periodista y la de su familia, así como la de su vivienda, y exigió que se investigue el ataque incendiario para hallar a los autores materiales.