Piedras, impactos y rebotes de proyectiles lacrimógenos limitaron la cobertura a cuatro trabajadores de medios digitales, un reportero y un camarógrafo de una televisora estatal, un camarógrafo de una televisora extranjera, y una reportera gráfica de una agencia de noticias internacional durante la manifestación ciudadana convocada por la oposición venezolana en la ciudad de Caracas.
Este artículo fue publicado originalmente en ipysvenezuela.org el 9 de abril de 2017.
– Fuerzas de seguridad y grupos colectivos encabezan los ataques contra la libertad de expresión y de información
– IPYS Venezuela registró obstáculos a la cobertura de 21 reporteros, 10 reporteros gráficos, cinco corresponsales extranjeros, dos camarógrafos y un reportero ciudadano desde el 28 de marzo.
Piedras, impactos y rebotes de proyectiles lacrimógenos limitaron la cobertura a cuatro trabajadores de medios digitales, un reportero y un camarógrafo de una televisora estatal, un camarógrafo de una televisora extranjera, y una reportera gráfica de una agencia de noticias internacional durante la manifestación ciudadana convocada por la oposición venezolana en la ciudad de Caracas, para exigir la restitución de las atribuciones constitucionales al parlamento nacional y la realización de elecciones.
Cierres a las vías de acceso
Por tercera vez en ocho días, periodistas y ciudadanos reportaron la obstaculización del tránsito vehicular hacia la ciudad de Caracas.
Los accesos a la ciudad de Caracas a través de la autopista Caracas-La Guaira, la autopista Regional del Centro (ARC) y la carretera Panamericana fueron obstruidos desde primeras horas del día por funcionarios de seguridad.
La Autopista Regional del Centro (ARC) fue cerrada por funcionarios de la Policía (PNB) y Guardia Nacional Bolivariana (GNB) en ambos sentidos a la altura de La Cabrera, sentido Valencia-Caracas. Usuarios alertaron de otros puntos de control policial que represaban el tránsito en el peaje de Las Tejerías y Hoyo de La Puerta, sentido Caracas.
Militares también cerraron en ambos sentidos la carretera Panamericana a la altura del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC).
A las nueve y media de la mañana se registró fuerte presencia de funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana en Plaza Venezuela, municipio Libertador, donde reportaron la presencia de tanquetas y ballenas antimotines. También hubo presencia de este cuerpo militar en el Puente Los Gemelos, detrás del Centro Comercial El Recreo.
El Metro de Caracas no prestó servicio comercial en las estaciones Chacao, Chacaíto, Sabana Grande, Colegio de Ingenieros, Bellas Artes, Parque Carabobo, La Hoyada, Capitolio y Caño Amarillo, de la Línea 1; El Silencio, de la Línea 2; Teatros, Nuevo Circo, Parque Central y Zona Rental, de la Línea 4, y Bello Monte, de la Línea 5. El anuncio del cierre de las 15 estaciones se dio a las 5 de la mañana a través de Twitter. Aseguran que el fin de la medida fue garantizar la seguridad del personal e instalaciones del sistema..
Después de las marchas convocadas el 4 y 6 de abril pasado, que no pudieron llegar al Palacio Federal Legislativo ni a la Defensoría del Pueblo por la limitación y acción ejercida por los cuerpos de seguridad del Estado, la oposición venezolana convocó a una movilización hacia la avenida Francisco de Miranda el sábado 8 de abril que comenzó en varios puntos de la ciudad, se concentró en la calle Elice de Chacao y avanzó por la avenida Libertador.
Limitaciones a trabajadores de medios
Después de mediodía, la movilización en Caracas comenzó a ser reprimida por los gases lacrimógenos disparados desde un piquete de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) en las inmediaciones de la avenida Francisco Solano a la 1 y 20 de la tarde, y luego en el Boulevard de Sabana Grande a la 1 y 40. En este período, resultaron afectados varios reporteros por el rebote de proyectiles, gases lacrimógenos, y piedras de considerable tamaño que fueron arrojadas por personas desconocidas. El ataque lacrimógeno contra manifestantes se extendió hacia Chacao y Altamira, donde se registraron momentos de tensión entre manifestantes y cuerpos de seguridad estatal.
A las dos de la tarde, Elyangélica González, corresponsal de Caracol Radio y Univisión, confirmó a IPYS Venezuela que su camarógrafo, Edgar Trujillo, recibió el impacto de una bomba lacrimógena que le rebotó en una mano cuando grababa la acción de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) contra los manifestantes, en la avenida Libertador de la ciudad de Caracas. Aunque siente dolor, Trujillo se encuentra bien.
El periodista Héctor Antolínez y los reporteros gráficos Rafael Briceño y Antony Aparicio, del portal digital Contrapunto, resultaron heridos por disparos de lacrimógenas hechos por funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), cuerpo de seguridad del Estado, cuando enfrentaban la protesta en distintos puntos de la ciudad. Antolínez se encontraba en la avenida Libertador, mientras que Briceño y Aparicio se encontraban en El Rosal.
Antolínez recibió el impacto en el estómago, Briceño fue impactado en la rodilla y recibió una pedrada en la cara. Aparicio recibió el impacto en uno de sus muslos. Aseguraron que los proyectiles no fueron disparados directamente en su contra, sino que fueron rebotes. Los reporteros fueron atendidos y, para el momento que fue registrada esta información, continuaban sus labores reporteriles.
A las cinco y media de la tarde, Luis Gonzalo Pérez, reportero multimedia de Caraota Digital, denunció haber recibido un impacto a quema ropa en la pierna derecha, de una bomba lacrimógena, cuando se encontraba cubriendo, junto con otros 14 reporteros, la represión de los funcionarios policiales contra los manifestantes de la avenida Libertador, a la altura de Chacaíto. Pérez fue atendido y regresó a la redacción del medio de comunicación digital.
Una reportera gráfica que cumple funciones para una agencia estadounidense de noticias recibió el impacto de una piedra lanzada por una persona desconocida, mientras hacía fotografías de la misma protesta en las inmediaciones de la sede de Fedecámaras.
El canal oficial Venezolana de Televisión (VTV) denunció que su equipo reporteril sufrió limitaciones durante la cobertura de la manifestación, a la altura de la calle Élice, municipio Chacao. En el video, difundido por la televisora, se observa cómo el periodista Jesús Manzanarez y el camarógrafo se retiraron del lugar, luego del incidente con algunos manifestantes.
Agresiones y limitaciones en el interior del país
Las protestas ciudadanas demandando elecciones ocurren también en el interior del país, donde se han producido agresiones e incidentes contra trabajadores de la prensa. Una protesta en el distribuidor San Blas, en la ciudad de Valencia, estado Carabobo, fue el escenario donde funcionarios policiales agredieron al fotoperiodista freelance, José Miguel Medina; Luis Natera, reportero de Radio Fe y Alegría; León Jiménez, reportero del periódico regional Notitarde, y Juan Carlos Hernández, fotoperiodista de Últimas Noticias. Los reporteros fueron víctimas de abuso de la fuerza por parte de los funcionarios, quienes también retuvieron a Natera y Medina, y rompieron la lente de la cámara de este último.
A las siete con cuarenta minutos de la noche, alrededor de 10 ó 15 encapuchados atacaron con palos y piedras la fachada en la sede del Diario Nuevo Día, en el estado Falcón. A los pocos minutos regresaron para dejar una bomba molotov. En el lugar se encontraba el personal de guardia conformado por dos periodistas, dos diagramadores y una correctora.
Encapuchados lanzaron piedras,rompen vidrios e intentaron incendiar parte de un depósito Nuevo Día con molotov pic.twitter.com/Kn9nBuPzOd
— Diario Nuevo Día (@nuevodiaenlinea) 9 April 2017
En Portuguesa, a 568,3 km de distancia de la capital venezolana, un policía regional intentó despojar de su cámara al reportero Sergio Niño cuando registraba la detención de la dirigente de Vente Venezuela, María Oropeza. El periodista de Periódico de Occidente alcanzó a registrar en imágenes el momento en que el funcionario intentó impedir que registrara el hecho.
Restricciones a la cobertura periodística
A partir de las sentencias 155, del 28 de marzo, y 156, del 29 de marzo, que limitaron la inmunidad parlamentaria y suprimieron las competencias de la Asamblea Nacional (AN), comenzó una serie de protestas ciudadanas para denunciar un “golpe de Estado jurídico”. Se solicita la destitución de los magistrados del TSJ, que habrían incurrido en una violación a los principios constitucionales con la aprobación de estas sentencias, así como la realización de las elecciones de gobernadores cuyo período venció en diciembre de 2016, y de las elecciones municipales previstas para este año. Las movilizaciones continuaron el 4 y el 6 de abril.
Desde el 28 de marzo, cuando comenzaron las protestas ciudadanas, IPYS Venezuela registró 25 limitaciones a la cobertura de asuntos de interés público, 19 agresiones físicas, 11 hechos de intimidación, 4 ataques contra las herramientas de trabajo, 3 detenciones arbitrarias, 3 robos y 1 ataque contra la sede de un medio de comunicación
De los 39 trabajadores de medios que resultaron afectados, 21 fueron reporteros; 10, reporteros gráficos; 5, corresponsales extranjeros, 2 camarógrafos y 1 reportero ciudadano. Estos trabajadores cumplieron funciones para 12 medios digitales, 6 televisoras, 5 medios impresos, 3 agencias de noticias, 1 radioemisora, 1 organización política y 1 organización pública.
En el marco de estas protestas también se denunció el bloqueo por DNS en los cinco principales proveedores de servicio de Internet de los portales de Vivo Play TV, VPI TV y Capitolio TV (televisora del Poder Legislativo).
IPYS Venezuela exhorta al Estado venezolano a garantizar la seguridad de los comunicadores sociales en el cumplimiento de sus funciones y exige que se investiguen las denuncias por presuntos hechos en los que hubiere abuso del poder policial y militar, así como ataques a la integridad física de los comunicadores por civiles armados y simpatizantes políticos.