El asesinato de Villavicencio no fue solo un ataque contra su persona, sino un atentado criminal contra la democracia y el Estado de derecho en Ecuador.
Este artículo fue publicado originalmente en fundamedios.org.ec el 9 de agosto de 2024.
En este día, cuando se cumple un año del brutal asesinato del candidato presidencial y periodista Fernando Villavicencio, Fundamedios expresa su más enérgica condena y repudio a uno de los crímenes más atroces en la historia política del Ecuador. El magnicidio de Villavicencio, perpetrado a solo 11 días de las elecciones de 2023, dejó una herida profunda en el tejido democrático de nuestro país y representa una deuda aún pendiente con la justicia, la verdad y la memoria.
El asesinato de Villavicencio no fue solo un ataque contra su persona, sino un atentado criminal contra la democracia y el Estado de derecho en Ecuador. Este acto cobarde y calculado, ejecutado en medio de una trama que involucra a grupos políticos con nexos con el crimen organizado, marcó un punto de inflexión hacia una espiral de violencia, corrupción e impunidad que amenaza con desintegrar las bases mismas de nuestra sociedad.
Si bien algunos de los autores materiales de este horrendo crimen han sido sentenciados, la justicia ecuatoriana sigue en deuda con la nación al no haber procesado a los autores intelectuales. Los verdaderos responsables, aquellos que orquestaron y financiaron este ataque, continúan ejerciendo poder e influencia en vastos sectores del Estado, la justicia, la política, la economía y, lamentablemente, incluso en el periodismo.
Fundamedios insiste en que no podemos permitir que el sacrificio de Fernando Villavicencio sea en vano. La lucha por esclarecer los hechos y llevar a todos los responsables ante la justicia es un deber ineludible para honrar su memoria y proteger los principios democráticos que él defendió con tanto valor. Villavicencio fue un defensor incansable de la verdad, un luchador contra la corrupción y un crítico feroz de las mafias enquistadas en el poder. Su legado nos obliga a no descansar hasta que se haga justicia completa y verdadera.
Este aniversario debe servir como un llamado a la acción para todos los ecuatorianos y las instituciones del Estado. Es fundamental que se redoblen los esfuerzos para investigar a fondo este crimen y garantizar que aquellos que se esconden tras las sombras del poder y la corrupción no queden impunes. La independencia y eficiencia de nuestras instituciones judiciales son cruciales para este propósito.
Además, es imperativo fortalecer la protección a los periodistas y defensores de los derechos humanos en Ecuador. El asesinato de Villavicencio es un recordatorio doloroso de los riesgos que enfrentan aquellos que se atreven a desafiar al poder corrupto y exponer la verdad. Fundamedios seguirá vigilante y comprometido con la defensa de la libertad de expresión y la seguridad de quienes ejercen el periodismo en nuestro país.
En este primer aniversario del asesinato de Fernando Villavicencio, reiteramos nuestra solidaridad con su familia y seres queridos. Compartimos su dolor y su demanda de justicia. No descansaremos hasta que se conozca toda la verdad y se sancione a todos los culpables, sin excepciones.
Finalmente, llamamos a la sociedad ecuatoriana a mantener viva la memoria de Fernando Villavicencio y a continuar su lucha por un Ecuador más justo, transparente y democrático. Su ejemplo debe inspirarnos a todos a seguir adelante, con determinación y valentía, en la defensa de los valores que él encarnó.
Fundamedios realizó un recuento de los hechos desde el asesinato de Villavicencio, lee más aquí