El hecho “es más condenable aún porque refleja una tendencia al uso de la fuerza legal, de manera prepotente, para acallar a un medio que ejerce su pleno derecho a informar y a opinar, como cualquier ciudadano en el país”, dijo la ANP.
(ANP/IFEX) – La Asociación Nacional de la Prensa (ANP) calificó como “atropello a los derechos fundamentales de la persona” a la agresión sufrida el sábado 4 de febrero de 2012 por el director de Radio Esperanza, el sacerdote católico Juan Carlos Ferrufino, en la población de Aiquile, en el departamento de Cochabamba.
El director ejecutivo de la ANP, Juan León Cornejo, declaró que “una agresión de esa naturaleza tiene connotaciones particulares por tratarse del director de un medio de comunicación”.
Los medios impresos informaron que dos oficiales de policía y un guardaespaldas golpearon a Ferrufino y el hecho desató la furia de los pobladores de esta región valluna, en medio de una festividad religiosa.
El periódico «Página Siete» de La Paz habló con el sacerdote que relató la persecución y amenazas de los policías. “Ha sido una amenaza, me decían que me calle, que no debo hablar muchas cosas. Intentaron golpearme, me persiguieron hasta que me tuve que ocultar en una casa…”, declaró.
“Soy un poco crítico con el gobierno y con la Alcaldía de turno”, declaró Ferrufino a «Página Siete».
Los informes periodísticos señalan que los dos policías y el ciudadano que los apoyaba, desataron la violencia en la población y emplearon armas de fuego con las que hirieron a tres personas.
El ministro de gobierno, Carlos Romero, afirmó que “no se va a proteger a nadie. Lo que pasó en Aiquile es muy grave, porque los policías forman parte de una institución fundamental, para garantizar la seguridad y los derechos de las personas”.
El hecho “es más condenable aún porque refleja una tendencia al uso de la fuerza legal, de manera prepotente, para acallar a un medio que ejerce su pleno derecho a informar y a opinar, como cualquier ciudadano en el país”, dijo León.
Testigos de la violencia, informaron al periódico «Los Tiempos» que los policías conformaban un grupo de avanzada para la llegada del ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, pero un portavoz de ese despacho se comunicó con una emisora de La Paz para desvirtuar la versión.
El fiscal de Distrito, Camilo Medina, ordenó la detención de los dos oficiales de policías en el penal de San Sebastián de la ciudad de Cochabamba, mientras se busca al tercer agresor que permanece prófugo.