Un periodico de oposicion en la República Turca de Chipre del Norte fue atacado nuevamente, esta vez el 24 de mayo con una bomba, informan el International Press Institute (Instituto Internacional de Prensa, IPI), Reporteros sin Fronteras (RSF) y la Federacion Internacional de Periodistas (FIP). La bomba exploto en el taller de impresion del diario […]
Un periodico de oposicion en la República Turca de Chipre del Norte fue atacado nuevamente, esta vez el 24 de mayo con una bomba, informan el International Press Institute (Instituto Internacional de Prensa, IPI), Reporteros sin Fronteras (RSF) y la Federacion Internacional de Periodistas (FIP). La bomba exploto en el taller de impresion del diario «Avrupa» en Nicosia y causo graves daños al edificio y destruyo papel de imprenta, periodicos viejos y otro equipo de impresion, dice el IPI. No hubo lesionados en la explosion y la policía dice que nadie ha reivindicado la responsabilidad por el ataque, informa IPI.
«Avrupa», que tiene una postura crítica hacia el gobierno del presidente Ralf Denktash, ha sido víctima durante años de intimidacion, acciones judiciales e interferencia oficial, dice la FIP. La Federacion señala que en noviembre pasado, el taller de impresion del periodico fue incendiada con un coctel molotov. Según IPI, el propietario del periodico y editor en jefe, Sener Levent y varios de los reporteros del periodico fueron arrestados el 8 de julio de 2000 por «actividades de espionaje» e «intentos de infiltrar círculos militares», pero luego fueron absueltos. Además, se ha decomisado equipo de oficina del periodico, se han interpuesto varias demandas de difamacion en su contra y en diciembre de 1999 un tribunal multo a «Avrupa» con USD 260,000 supuestamente por difamar al Presidente, señala el IPI. La organizacion agrega que ha habido numerosos intentos judiciales de cerrar el periodico.
Levent recibe en forma regular amenazas de muerte que, en su opinion, provienen de fuerzas paramilitares, dice RSF. Las oficinas del diario recibieron supuestamente más de 500 mensajes telefonicos insultantes la tarde antes del estallido de la bomba. El periodico «Yenicag Gazetesi» informa que los mensajes vinieron de la escuela de entrenamiento del ejército de la república, señala RSF.