Los recientes ataques a los medios independientes en Nigeria son causa de inquietud, y llegan en un momento en el cual el país está intentando pasar por una transicion a la democracia, informan el Committee to Protect Journalists (Comité por la Proteccion de los Periodistas, CPJ), Reporteros sin Fronteras, la Federacion Internacional de Periodistas (FIP), […]
Los recientes ataques a los medios independientes en Nigeria son causa de inquietud, y llegan en un momento en el cual el país está intentando pasar por una transicion a la democracia, informan el Committee to Protect Journalists (Comité por la Proteccion de los Periodistas, CPJ), Reporteros sin Fronteras, la Federacion Internacional de Periodistas (FIP), ARTICLE 19 y el International PEN Writers in Prison Committee (Comité de Escritores en Prision de PEN Internacional, WiPC). El 11 de febrero, Lanre Arogundade, presidente del Consejo del Estado de Lagos de la Nigeria Union of Journalists (Union Periodistas de Nigeria, NUJ), fue arrestado y detenido durante tres días por la policía después de que se presento una queja contra él, a causa de una peticion y fue acusado de «causar dificultades». La FIP cree que Arogundade fue arrestado a consecuencia de su trabajo por la libertad de prensa y está preocupada debido a que el arresto se produjo en un momento en que él «había estado recibiendo amenazas de muerte a consecuencia de sus actividades en la NUJ».
El 8 de febrero, los policías arrestaron al gerente general Idowu Obassa, al gerente de prensa Wole Odofin y al presidente del capítulo de «The News» de la NUJ, Tajudeen Suleimen, en las oficinas de «The News». Los tres periodistas fueron detenidos toda la noche. Se desconocen los motivos del arresto. El 6 de febrero de 1999, la policía allano la oficina del taller de impresion Satellite Press en Lagos y arresto a Kayode Sofuyi, asistente de produccion de la revista «The News», y a Kingsley Uwannah, el contador en jefe, junto con el editor de «Prime Sunset». La policía también decomiso 80,000 copias de la revista «The News», que decía en la portada «Abacha’s Co-Looters, Aluko Reveals All» (El compañero de Abacha en el saqueo, Aluko, lo dice todo).
ARTICLE 19 dice que «el reciente aumento en el hostigamiento de los medios, y la ineficacia del gobierno para encarar muchos casos prominentes de abusos a los derechos humanos de los periodistas… plantean serias preguntas sobre la profundidad del compromiso del gobierno con los derechos humanos». Además, ARTICLE 19 dice que «el gobierno no ha derogado decretos y leyes militares cruciales que están muy por debajo de los estándares internacionales», y está «alarmado de que las elecciones nacionales y presidenciales se están celebrando en la ausencia de un marco constitucional establecido».
Mientras tanto, la campaña para liberar a Niran Malaolu, editor del periodico «The Diet», quien fue encarcelado en diciembre de 1997 y sentenciado el año pasado a 15 años por informar de un supuesto plan de golpe de Estado, se ha acelerado debido a la grave enfermedad del periodista en prision. Su esposa, Olubukola Malaolu, apelo al dirigente de Nigeria, general Abdulsalami Abubakar, a liberarlo debido a que «él no cometio ningún crimen». Ella hizo su llamado en un programa de entrevistas por television transmitido desde Lagos, en el cual aparecio con Babatunde Olugboji, director ejecutivo del Centre for Free Speech (Centro por la Libre Expresion, CFS). CFS comenzo la «Campaña de Liberacion de Malaolu» en enero y ha repartido mires de camisetas, carteles, pegatinas y volantes con la leyenda «Free Malaolu Now» (Liberen a Malaolu ahora) en todo el país.
Según el «Media Monitor» del Independent Journalism Centre (Centro de Periodismo Independiente, IJC) No. 04-05 del 8 de febrero de 1999, el 2 de febrero, el secretario de Prensa del jefe de Estado, Mallam Mohammed Haruna, dijo a los corresponsales de la Casa del Estado en Abuja que Abubakar «estaba considerando los casos de Malaolu y otras personas encarceladas por el plan de golpe de estado que se dice fue descubierto por el gobierno del finado general Sani Abacha en diciembre de 1997». Haruna dijo que sus investigaciones habían demostrado que Malaolu era el único periodista que seguía en la cárcel, y que él había recomendado su liberacion. A principios de este mes, Periodistas Canadienses por la Libertad de Expresion (CJFE) informo que Akina Deesor, un periodista ogoni que trabaja para Radio Rivers y de quien no se había sabido nada desde que fue detenido en agosto de 1996, fue liberado en febrero de 1997 y está de vuelta en su trabajo.