El número de periodistas muertos en Afganistán llego la semana pasada a siete, con el asesinato de cuatro reporteros el 19 de noviembre, informan el Committee to Protect Journalists (Comité por la Proteccion de los Periodistas, CPJ), la Federacion Internacional de Periodistas (FIP), Reporteros sin Fronteras (RSF) y la Asociacion Mundial de Periodicos (WAN). Según […]
El número de periodistas muertos en Afganistán llego la semana pasada a siete, con el asesinato de cuatro reporteros el 19 de noviembre, informan el Committee to Protect Journalists (Comité por la Proteccion de los Periodistas, CPJ), la Federacion Internacional de Periodistas (FIP), Reporteros sin Fronteras (RSF) y la Asociacion Mundial de Periodicos (WAN). Según RSF, los reporteros fueron identificados como Maria Grazia Cutuli del diario italiano «Corriere della Serra», Julio Fuentes del periodico español «El Mundo» y dos camarografos de Reuters – el australiano Harry Burton y el afgano Azizullah Haidari.
CPJ expresa su indignacion por los asesinatos, que supuestamente ocurrieron cuando los periodistas se dirigían a Kabul desde la ciudad oriental de Jalalabad. Los periodistas viajaban a la cabeza de un convoy de seis a ocho vehículos cuando un grupo de hombres armados les ordeno que se detuvieran. CPJ dice que un conductor y traductor que formaba parte del convoy dijo a la BBC que los cuatro periodistas fueron sacados de sus autos, llevados a las colinas circundantes y ejecutados con rifles Kalashnikov. Según RSF y FIP, el convoy viajaba sin proteccion armada. El CPJ señala que el área por la que viajaban los periodistas – la provincia de Nangarhar – solo había sido tomada por las fuerzas antitalibán unos cuantos días antes del incidente. Las autoridades locales no habían logrado el control competo del área cuando los periodistas fueron muertos.
Según fuentes de RSF, el área es conocida por albergar bandidos. El 18 de noviembre, tres periodistas de Radio Francia Internacional fueron atacados y robados por bandidos en el mismo camino por el que viajaban los cuatro periodistas asesinados.
FIP exhorto a las organizaciones de medios a dejar de presionar a sus reporteros a hacer una «cobertura cada vez más dramática del conflicto en Afganistán». Tras señalar que más de 1,000 periodistas y trabajadores de los medios están trabajando en la region, la organizacion dijo que «buscar una ventaja no significa sacrificar la seguridad del personal». Para obtener más informacion, vea www.ifj.org, www.rsf.fr, www.cpj.org y www.wan-press.org.»>http://www.ifj.org»>www.ifj.org, www.rsf.fr, www.cpj.org y www.wan-press.org.
Mientras tanto, el Committee to Protect Journalists (Comité por la Proteccion de los Periodistas, CPJ) y la Federacion Internacional de Periodistas (FIP) están expresando su preocupacion por el informe de que la oficina en Kabul del canal de satélite Al Yazira fue bombardeada por un avion de Estados Unidos. El 13 de noviembre, el edificio que albergaba a Al Yazira, fue alcanzado por dos bombas de 500 libras lanzadas por un avion estadounidense, según voceros del Comando Central Estadounidense entrevistados por CPJ. No se informo de lesiones. Las oficinas cercanas de la BBC y la Associated Press también fueron dañadas por las bombas, señala la FIP. La FIP y el CPJ agregan que la oficina en Kabul de Al Yazira está ubicada en un área que alberga al Ministerio Talibán para la Supresion del Vicio y la Promocion de la Virtud, así como varios funcionarios talibán.
La FIP pone en tela de juicio el motivo del bombardeo y dice que suscita inquietudes acerca de si se ataca o no a los medios. «Al Yazira es una emisora polémica para muchos observadores occidentales, pero tiene credibilidad y estatura profesionales en el mundo árabe». El director de Al Yazira, Mohamed Jasem al Ali, no dijo si la estacion fue atacada en forma deliberada, pero señalo que las autoridades militares estadounidenses «sabían donde estamos y qué tenemos en nuestra oficina, y no recibimos advertencia alguna».
Desde los ataques del 11 de septiembre en Estados Unidos, Al Yazira ha recibido atencion de todo el mundo por sus informes exclusivos del interior de Afganistán. Fue la primera estacion en emitir las declaraciones terroristas hechas por Osama bin Laden después del 11 de septiembre, y presento informes desde las áreas controladas por los Talibán que están fuera del alcance de la mayor parte de los periodistas occidentales, según la FIP. Al Yazira también ha sido criticada por el Gobierno estadounidense por transmitir lo que el Departamento de Estado considera puntos de vista antiestadounidenses. En octubre, el secretario de Estado estadounidense Colin Powell pidio al dirigente de Qatar, jeque Hamad bin Khalifa al-Thani, que usara su influencia para «bajar el tono» de la cobertura de noticias de Al Yazira [Ver «Comunicados» IFEX Nos. 10-41, 10-40].