El equipo de prensa de La Verdad fue privado de libertad, en horas de la noche del 15 de abril, por un presuntos funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana, cuando cubrían acciones de hostigamiento contra personas que realizaban una protesta pacífica para exigir la auditoria de las elecciones presidenciales.
El 16 de abril de 2013, por orden de los tribunales penales fueron dejados en libertad plena Juan José Faría, reportero; Eduardo Méndez, reportero gráfico; Yolman Bejarano, chofer, equipo reporteril de La Verdad, diario privado regional, quienes estuvieron detenidos de manera arbitraria por 12 horas, por efectivos de seguridad del Estado, en el Municipio San Francisco, en Maracaibo, estado Zulia. Sin embargo, no les fueron devueltos los teléfonos móviles, cámara fotográfica, libreta de apuntes, y el automóvil de trabajo que les fueron retenidos durante la detención. Les informaron que deben realizar diligencias ante el Ministerio Público, para recuperar las pertenencias.
El equipo de prensa fue privado de libertad, en horas de la noche del 15 de abril, por un presuntos funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana, órgano militar que cumple funciones de seguridad pública, y efectivos de la Policía Municipal de San Francisco (Polisur), cuando cubrían acciones de hostigamiento por parte de hombres armados a bordo de motocicletas, contra vecinos que realizaban una protesta pacífica para exigir la auditoria de las elecciones presidenciales realizadas en Venezuela el 14 de abril de 2013.
Hasta las 8:30 a.m. del 16 de abril, los reporteros estuvieron detenidos en la sede policial en la zona de Sierra Maestra, una zona popular de la jurisdicción. Luego, fueron trasladados esposados, a los tribunales penales de la ciudad, donde estuvieron por dos horas en un calabozo, fueron requisados y fotografiados.
En la audiencia de presentación, el Tribunal Quinto de Control decidió dejar en libertad plena a Faría, Méndez, y Bejarano, por no haber ningún cargo o prueba contra ellos.
Mientras ocurría la audiencia en el tribunal, un grupo de periodistas del Zulia, se concentró en la sede de los tribunales para exigir la libertad plena del grupo detenido.
El hecho
Alrededor de las 11:00 p.m., del 15 de abril, Juan José Faría, quien además es corresponsal de IPYS-Venezuela en Zulia, junto a sus compañeros fueron detenidos de manera arbitraria por el presunto funcionario de la Guardia Nacional Bolivariana, de apellido Cañizález, quien portaba uniforme militar y estaba acompañado de un grupo de hombres que iban al borde de motocicletas, en el Municipio San Francisco, de la ciudad de Maracaibo. Allí los despojaron de sus pertenencias, entre ellas la libreta del reportero, la cámara fotográfica y los celulares. El oficial Cañizález revisó la libreta de apuntes del periodista y leyó los nombres de todas las personas a las que Faría había entrevistado, algunas de las cuales le habían pedido la reserva de su nombre. El funcionario amenazó con buscar y detener a estas personas.
Minutos antes, habían dado cobertura a denuncias realizadas por vecinos del sector quienes le manifestaron que hombres armados a bordo de motocicletas habían ingresado de forma arbitraria a algunas de sus casas, en el momento que realizaban un cacerolazo (protesta masiva con ruidos producidos por ollas de cocina).
Esto ocurrió mientras en todo el país se produjo una protesta ciudadana masiva para exigir al Consejo Nacional Electoral (CNE) el conteo de los comprobantes de votación en cada centro electoral, para corroborar los resultados de las elecciones del 14 de abril; y en rechazo a la proclamación, por parte del ente electoral, de Nicolás Maduro como Presidente de la República, sin que antes se hubiese atendido la petición del reconteo de los votos.
Faría intentó tomar, también, declaraciones por algunos funcionarios policiales y los motorizados que se encontraban en el lugar pero estos señalaron que no estaban autorizados a dar conversar con la prensa.
Luego, los reporteros del diario La Verdad se subieron al vehículo en el que se trasladaban para retirarse de la zona. Notaron que estaban siendo seguidos por hombres a bordo de motocicletas, que portaban pasamontañas y fusiles. Minutos después, fueron interceptados y detenidos, por dos patrullas de funcionarios policiales, y llegaron al lugar los motorizados que los estaban siguiendo.
Para detener al equipo de prensa, lo efectivos policiales alegaron que eran unos “desestabilizadores” y que no podían andar en la calle porque en el país había empezado “un golpe de Estado”. Luego, los trasladaron hasta un destacamento policial ubicado en zona Sierra Maestra, en Maracaibo, cerca de lugar donde lo interceptaron, donde fueron puestos a la orden de la Policía del Municipio San Francisco. Alegaron que la medida de detención era por orden expresar del Alcalde del municipio San Francisco, Omar Prieto, respaldado por el oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Allí les retuvieron sus documentos de identidad, y los mantuvieron en una celda por un rato hasta llevarlos a una de las oficinas. Los tres trabajadores del diario La Verdad estuvieron incomunicados durante el procedimiento. Faría señaló que el trato recibido por los funcionarios de Polisur fue respetuoso.
Luego de la detención, el Alcalde del Municipio San Francisco se refirió al equipo del diario La Verdad, acusándolos de desestabilizadores, en la televisora regional Coquivacoa TV. También, mostró la libreta que le habían decomisado al reportero.
Los detenidos permanecieron en la sede policial hasta la mañana del día siguiente, cuando fueron trasladados a los tribunales penales de la ciudad. Les dijeron que ese era un procedimiento de rutina. Les tomaron sus datos, les ordenaron desnudarse por completo, les revisaron la ropa interior. Luego los llevaron a otra oficina y les colocaron las esposas para llevarlos hasta la sala donde se realizó la audiencia de presentación, en la que estuvieron presentes los abogados que los asistieron. Después de culminado el procedimiento, les entregaron la boleta en la que les otorgaban libertad plena.
Faría relató que varios funcionarios policiales y judiciales, incluyendo la presidente del Circuito Judicial del Zulia, le pidieron disculpas por la medida de detención que había tomado en contra del equipo de prensa.
3 casos en 4 meses
Éste es el tercer caso de violaciones a la libertad de expresión en contra de Juan José Faría, quien se desempeña como reportero de la fuente de sucesos, en lo que va de 2013. Durante este año, ha recibido amenazas de procedimientos legales y acciones de intimidación por parte de otros cuerpos de seguridad del Estado y autoridades públicas de Maracaibo.
El 30 de enero de 2013, la delegación del estado Zulia del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) -órgano adscrito al Ministerio para las Relaciones de Interior y Justicia- interrogó e intentó implicar al Faría con mafias carcelarias. Además, este cuerpo de seguridad abriría un expediente contra el periodista atribuyéndole presuntos cargos por instigación al delito, asociación para delinquir, y generar zozobra. Hasta la fecha, IPYS-Venezuela no tiene conocimiento de que esta denuncia haya prosperado.
Luego, el 2 de abril de 2013, Omar Rojas Fermín, ex director del retén policial El Marite, de Maracaibo amenazó a Faría con introducir una demanda en su contra ante los órganos de justicia de la región. Además, lo intimidó al expresarle que emprendería acciones en contra de su familia. Este incidente se produjo luego de que el reportero publicara varias notas sobre un conflicto carcelario en la localidad. Al día siguiente, Rojas pidió disculpas por las amenazas que había dirigido contra el periodista.
La detención arbitraria de los reporteros configura una violación a la libertad de expresión e información en Venezuela, derechos establecidos en los artículos 57 y 58 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Además, este incidente se enmarca en una serie de obstáculos a la labor periodística registrados durante los últimos días, en el marco del proceso electoral presidencial.