Tras el asesinato del primer ministro serbio Zoran Djindjic la semana pasada y la imposicion de un estado de emergencia, el Committee to Protect Journalists (Comité para la Proteccion de los Periodistas, CPJ) pidio al Gobierno serbio que mantenga el libre flujo de informacion después de las noticias de que se han impuesto restricciones a […]
Tras el asesinato del primer ministro serbio Zoran Djindjic la semana pasada y la imposicion de un estado de emergencia, el Committee to Protect Journalists (Comité para la Proteccion de los Periodistas, CPJ) pidio al Gobierno serbio que mantenga el libre flujo de informacion después de las noticias de que se han impuesto restricciones a los medios.
Bajo el estado de emergencia, se prohíbe a los medios distribuir informacion acerca de las razones de la imposicion que no haya sido emitida por el Gobierno, dice el CPJ. La orden no especifica las penas por violar la prohibicion, que las autoridades dicen estará en vigor hasta que se haya arrestado a los asesinos.
Luego, en una reunion con altos editores de los medios de Belgrado, celebrada el 12 de marzo, el viceprimer ministro Zarko Korac pidio a los medios «abstenerse de informar de las acciones de aquellos a que se arrestará, sus abogados y analistas que podrían complicar los arrestos», agrega la Association of Independent Electronic Media (Asociacion de Medios Electronicos Independientes, ANEM).
Korac pidio a los editores que informaran solo de declaraciones oficiales hechas por los organismos del Gobierno o los partidos políticos.
El CPJ dice que las restricciones no son tan amplias como suenan y aparentemente están destinadas a los medios y periodistas vinculados a la mafia Zemun, los supuestos asesinos de Djindjic.
Mientras tanto, CPJ, Reporteros sin Fronteras (RSF) y el International Press Institute (Instituto Internacional de Prensa, IPI) suscitaron inquietudes por la seguridad de dos periodistas que recibieron amenazas de muerte por informar de un escándalo de abuso sexual que supuestamente implicaba a un obispo ortodoxo serbio en Vranje.
Vukasin Obradovic, propietario y editor en jefe del periodico semanal «Novine Vranjske» y el reportero Goran Antic recibio una carta anonima el 3 de marzo que los amenazaba de muerte a ellos, a sus familias y al personal del semanario.
En enero, «Novine Vranjske» publico una serie de artículos acerca de cinco muchachos de Vranje que presentaron cargos penales contra el obispo Pahomije, quien encabeza la diocesis ortodoxa serbia local, informa el CPJ.
Los muchachos acusan a Pahomije de abuso sexual cometido durante un periodo de varios años. Pahomije presento una demanda por difamacion contra Obradovic y Antic en respuesta a sus artículos.
Visite estos vínculos:
– CPJ: www.cpj.org«>http://www.cpj.org/news/2003/Serbia13mar03na.html»>www.cpj.org
– Informe de CPJ «Progress Denied» (Progreso negado): www.cpj.org«>http://www.cpj.org/Briefings/2002/Bosnia_Serbia_june02/BosniaSerbia_june02.html»>www.cpj.org
– International Press Institute (Instituto Internacional de Prensa): ifex.org«>http://ifex.org/alerts/view.html?id=12063»>ifex.org
– Informe de Human Rights Watch Informe sobre Serbia y Montenegro: www.hrw.org«>http://www.hrw.org/wr2k3/europe17.html»>www.hrw.org
– Informe 2002 de RSF: www.rsf.org