Jaime Manrique, reportero gráfico del diario La Voz, fue agredido físicamente y detenido de manera arbitraria por funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana, cuando cubría una protesta de personas damnificadas que exigían al gobierno nacional respuesta al déficit habitacional.
(IPYS-Venezuela/IFEX) – El 20 de febrero de 2013, Jaime Manrique, reportero gráfico del diario La Voz, periódico privado con alcance en el Área Metropolitana de Caracas, fue agredido físicamente y detenido de manera arbitraria por funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana, cuerpo de seguridad del Estado, cuando cubría una protesta de personas damnificadas que exigían al gobierno nacional respuesta al déficit habitacional. El hecho ocurrió en el sector El Paraíso, al oeste de Caracas, Distrito Capital.
Manrique comentó a IPYS-Venezuela que acudió al sitio, junto a la reportera Mairy Chourio, a cubrir una manifestación pacífica de personas que exigían su derecho a una vivienda digna debido a que se encuentran viviendo desde hace 2 años en un refugio, dispuesto por las autoridades gubernamentales luego de unas fuertes lluvias que afectaron diversas zonas de Caracas, y provocaron derrumbes.
Mientras el fotógrafo realizaba su labor fue golpeado en una pierna y detenido de manera arbitraria por 3 horas en una unidad militar móvil. Los funcionarios cuestionaban su labor como reportero gráfico, debido a que registró las imágenes de la protesta y tenía tomas cuando la Guardia Nacional Bolivariana actuó de manera violenta contra los manifestantes.
Al parecer, los damnificados habían cerrado una de las calles de la zona como medida de protesta pacífica. Según relató Manrique, efectivos de la Guardia Nacional llegaron sin conversar ni llegar a un acuerdo con los damnificados. Empezaron a empujar con sus escudos a las personas que ejercían la acción de calle. Los efectivos lanzaron algunas camas, símbolo de la protesta, al grupo que estaba concentrado exigiendo respuesta del gobierno nacional. También, dispararon perdigones para dispersar la manifestación pacífica.
Manrique afirmó que él capturo las imágenes de lo sucedió en el sitio. En medio de los hechos, se le acercó un efectivo militar y lo apuntó con un arma de fuego. En vista de esta reacción, el reportero gráfico empezó a correr y fue perseguido por el funcionario militar. La periodista que lo acompañaba se quedó en las inmediaciones de la protesta.
Luego de haber recorrido cerca de dos cuadras, Manrique se detuvo frente a un complejo deportivo de la zona. Allí, 8 funcionarios militares le ordenaron que se bajara el pantalón y lo requisaron. Según el testimonio del reportero gráfico, recibió insultos de los militares, quienes además les decían que estaba prohibido tomar fotografías sobre esos hechos. Para intimidarlo, uno de los funcionarios le dijo: “El presidente (Hugo) Chávez nos ordenó que arremetiéramos contra los periodistas”.
Los efectivos le quitaron su cámara fotográfica y le rompieron el chip de almacenamiento de la cámara por lo que perdió todas las fotografías que había realizado.
También, le quitaron el carnet de identificación del periódico para el que labora. Luego, lo detuvieron de manera arbitraria y lo llevaron a una unidad móvil de la Guardia Nacional Bolivariana que se encuentra en la zona, donde estuvo por 3 horas. Manrique, también, relató que no le permitían comunicarse con sus jefes del periódico para informar sobre la situación.
En la carpa, entraron varios funcionarios y le insistían que no debía realizar fotografías de las protestas. Pasado un rato, un oficial que estaba comandando la unidad militar lo dejó en libertad.
Hasta el momento de la entrevista con IPYS-Venezuela, el reportero gráfico no había presentado su denuncia sobre la agresión física y la detención arbitraria, ante las instituciones de justicia correspondientes.
Éste es el caso número 6 de agresión física contra periodistas que reporta IPYS-Venezuela, entre enero y febrero de este año. 4 de estos incidentes han sido propiciados por funcionarios de cuerpos de seguridad del Estado.