Aunque los periodistas han protegido durante mucho tiempo los derechos de todos los ciudadanos de Nigeria, todavía no existen leyes que les ofrezcan proteccion en su trabajo, dice Babafemi Ojudu en «The Fourth Estate» (El cuarto poder, No. 5), una publicacion del Independent Journalism Centre (Centro de Periodismo Independiente, IJC) y Journalists for Democratic Rights […]
Aunque los periodistas han protegido durante mucho tiempo los derechos de todos los ciudadanos de Nigeria, todavía no existen leyes que les ofrezcan proteccion en su trabajo, dice Babafemi Ojudu en «The Fourth Estate» (El cuarto poder, No. 5), una publicacion del Independent Journalism Centre (Centro de Periodismo Independiente, IJC) y Journalists for Democratic Rights (Periodistas por los Derechos Democráticos, JODER). En su artículo «Media: The African Experience» (Medios: la experiencia africana), Ojudu evalúa los horribles ataques y abusos que los periodistas sufrieron bajo el régimen del general Abacha. Declara que la prensa en Nigeria y toda África «ha sido una de las actividades más castigadas en el combate por un buen gobierno, por la democracia y por la restauracion de la dignidad humana para nuestro pueblo». Al describir las ingeniosas tácticas de «periodismo guerrillero» que los periodistas usaron durante el régimen de Abacha, Ojudu dice que las cosas han mejorado para los periodistas en Nigeria desde que termino el régimen de Abacha. Sin embargo, siguen existiendo desafíos legales a los medios, dice Ojudu. Aunque no hay una legislacion que proteja a los periodistas y garantice el acceso a la informacion, existen leyes que funcionan contra la prensa. Señala como un ejemplo de esas leyes el decreto 48, que obliga a los periodicos a registrarse a cambio de una tarifa prohibitivamente elevada.
Bajo unas leyes tan represivas como estas, diecinueve estaciones interrumpieron transmisiones el 5 de octubre de 1999 por no pagar las «cuotas de renovacion», según un reciente informe de IJC. Hay numerosos grupos de medios que siguen cabildeando para derogar o reformar las leyes represivas de medios, dice Bankole Ebisemiju en la misma edicion de «The Fourth Estate». Ebisemiju considera los esfuerzos de la Nigerian Press Organisation (Organizacion Nigeriana de Prensa, NPO), un grupo general coordinador de organismos de prensa, por derogar el decreto 85 de 1992 y el decreto 60 de 1999, que uno de sus miembros describe como un «instrumento no disimulado de censura y una interferencia inaceptable con la libertad de prensa».
«The Fourth Estate» también incluye una entrevista con el periodista del periodico «Hallmark» Chris Mbah, a quien los militares detuvieron tres años bajo el régimen de Abacha. Aunque sufrio años de detencion y tortura en prision por su trabajo como periodista, su caso no recibio cobertura en los medios. Mbah dice que nadie, ni siquiera su familia, sabía que estaba detenido y que se le suponía muerto. Mbah declara que esto pudo haber sido al hecho que otro periodista que fue detenido al mismo tiempo, George Mbah, tenía el mismo apellido. Mbah fue arrestado por primera vez en 1994 por declarar en el «Scorpion Weekly», el periodico regional comunitario que ayudo a fundar, que Nigeria no se debería implicar en la guerra en Liberia. Fue liberado en julio pasado después de la muerte de Abacha. Desde entonces, Mbah fue arrestado otra vez y golpeado gravemente mientras cubría una manifestacion pacífica de trabajadores. Fue liberado unas cuantas horas más tarde.