Reporteros sin Fronteras (RSF) y el Committee to Protect Journalists (Comité por la Protección de los Periodistas, CPJ) están pidiendo la liberación de varios periodistas encarcelados durante una ofensiva contra la corrupción hecha por el gobierno interino de Bangladesh. El 9 de marzo, la policía arrestó a Idris Ali, editor de un semanario local, y […]
Reporteros sin Fronteras (RSF) y el Committee to Protect Journalists (Comité por la Protección de los Periodistas, CPJ) están pidiendo la liberación de varios periodistas encarcelados durante una ofensiva contra la corrupción hecha por el gobierno interino de Bangladesh.
El 9 de marzo, la policía arrestó a Idris Ali, editor de un semanario local, y a MA Muhit, corresponsal del periódico nacional «Jugantor». Según el «Daily Star» de Dhaka, los políticos locales se habían quejado de los periodista después de que éstos escribieron sobre la corrupción.
Dos días antes, informaron el CPJ y RSF, cientos de soldados y policías de Bangladesh habían allanado el periódico «Janakantha», arrestado al redactor y editor Atiqullah Khan Masud y habían registrado su casa. Khan Masud, quien a finales de enero había criticado abiertamente la imposición de la censura, está en custodia durante un mes por cargos de corrupción, actividades criminales y «ensuciar la imagen del país en el extranjero».
Desde que el presidente Iajuddin Ahmed declaró el estado de emergencia el 11 de enero, alrededor de 60 figuras políticas de Bangladesh han sido arrestadas, entre ellas 13 ex ministros y el hijo del ex jefe de Gobierno.
«Nos preocupa que las fuerzas de seguridad estén confundiendo la lucha contra la corrupción con la ofensiva contra los críticos especialmente en la prensa»; dijo RSF. «Pedimos al Gobierno interino que ordene la liberación de todos los periodistas encarcelados actualmente».
En febrero, la policía registró las casas de siete periodistas en Rupgonj, cerca de la capital, después de que se publicaron artículos que criticaban a un oficial de policía. También en febrero, los incendios mataron al menos a tres personas y lesionaron a más de 100 en un edificio de Dhaka que albergaba las estaciones de televisión privadas NTV y RTV y el periódicos en idioma bengalí «Amar Desh». Las tres empresas eran propiedad del político del Partido Nacionalista de Bangladesh Mosaddek Ali Falu, quien había sido arrestado tres semanas antes en la campaña contra la corrupción.
Mientras tanto, la Federación Internacional de Periodistas (FIP) exigió una investigación sobre si Jamal Uddin fue asesinado por su labor periodística. El cuerpo de Uddin, un corresponsal local de la agencia de noticias de Dhaka ABAS y el periódico regional de Rangamati «Dainik Giridharan», según el Foro de Periodistas de Derechos Humanos de Bangladesh (BMSF), fue encontrado el 6 de marzo.
Visite estos sitios:
– RSF: http://www.rsf.org/article.php3?id_article=21306
– CPJ: http://www.cpj.org/news/2007/asia/bangla08march07na.html
– FIP: http://www.ifj.org/default.asp?Index=4722&Language=EN