Las organizaciones reunidas en el consorcio Al Sur presentan “Reconocimiento facial en América Latina: tendencias en la implementación de una tecnología perversa”, un mapeo de 38 sistemas de reconocimiento facial desplegados en nueve países de la región, al alero de distintas políticas públicas.
Este artículo fue publicado originalmente en derechosdigitales.org el 8 de noviembre de 2021.
Las organizaciones reunidas en el consorcio Al Sur presentan “Reconocimiento facial en América Latina: tendencias en la implementación de una tecnología perversa”, un mapeo de 38 sistemas de reconocimiento facial desplegados en nueve países de la región, al alero de distintas políticas públicas.
El reporte, cuya redacción estuvo a cargo de Jamila Venturini y Vladimir Garay de Derechos Digitales, constata que se trata de una tecnología cuya utilización ha crecido de manera importante durante los últimos años, principalmente en el marco de políticas de seguridad que buscan incrementar la capacidad del estado para vigilar espacios públicos. Sin embargo, cabe notar su uso cada vez más común en otro tipo de actividades, como el control fronterizo y migratorio, el transporte y la asistencia social.
Común es la a todos los países analizados la falta de participación con la cual se diseñan las políticas públicas que incorporan el uso de sistemas de reconocimiento facial y la poca transparencia con la cual los sistemas son implementados y utilizados, muchas veces ocultando información relevante respecto a la tecnología utilizada y quién la provee. Por eso, uno de los hallazgos más importantes de la investigación es poder realizar un listado de empresas que están detrás de la implementación de estos sistemas.
Otra cuestión relevante es la falta de marcos normativos que expliciten la legalidad de la implementación de este tipo de tecnología, ni las restricciones que debiese contemplar sus usos, lo que no ha sido un obstáculo para los gobiernos a la hora de implementar estos sistemas. Completamente inexistentes son los estudios de impacto en materia de derechos humanos y la mayor parte de las veces no siquiera están contemplados procesos de auditoría externa, que permitan detectar eventuales fallas en el sistema, lo que abre la puerta para invisibilizar cualquier tipo de error que pueda derivar en abusos y discriminaciones en contra de las personas sujetas a este tipo de control biométrico.
La investigación está disponible en castellano, portugués e inglés, y está acompañada de un mini sitio web especialmente diseñado para la ocasión, que puede ser visitado en https://estudio.reconocimientofacial.info/
La investigación fue desarrollada por las organizaciones que forman parte del Consorcio Al Sur, a partir de una metodología propuesta por las siguientes organizaciones: Coding Rights, IPANDETEC, InternetLab, R3D, Derechos Digitales, TEDIC y Fundación Karisma.