El director de Prensa de la Asamblea Nacional calificó a Maru Morales, reportera de El Nacional, como "operadora política de la oposición" y desmintió una nota escrita por la periodista en la que daba cuenta de las restricciones a la prensa en esta institución pública.
El 7 de mayo de 2013, el director de Prensa de la Asamblea Nacional, principal organismo del poder legislativo, calificó a Maru Morales, reportera de El Nacional, periódico privado, como «operadora política de la oposición», según una nota de prensa del ente parlamentario. Crítico la labor periodística de Morales y dijo que ella se dedicaba a entorpecer el trabajo del equipo de prensa del parlamento. También, desmintió una nota escrita por la periodista en la que daba cuenta de las restricciones a la prensa en esta institución pública. El hecho ocurrió en Caracas, Distrito Capital.
Restricciones a la prensa en el parlamento
Morales relató a IPYS-Venezuela que acudió al edificio administrativo de la Asamblea Nacional José María Vargas, ubicado en el centro de Caracas, a cubrir una reunión de una comisión mixta que investiga los hechos de violencia que se generaron luego de las elecciones presidenciales del 14 de abril, con la que se busca «sustanciar un expediente contra Henrique Capriles», candidato presidencial de la oposición, quien no reconoció los resultados del Consejo Nacional Electoral, que dieron como ganador a Nicolás Maduro, con una estrecha diferencia porcentual. Según las declaraciones de voceros oficiales, Capriles, presuntamente, tendría responsabilidad en hechos de violencia generados en distintos estados del país.
Maru Morales; Mardolei Prin, reportera de Televen, televisora privada; y Samantha Aretuo, corresponsal de diario El Tiempo, con sede el Puerto La Cruz; recibieron información de Yasiret Yerena, jefe de relaciones públicas de la Asamblea Nacional sobre la decisión oficial de no permitir el ingreso a los reporteros a la sede parlamentaria, por supuesta instrucción de Ricardo Durán, jefe de prensa de la institución legislativa.
La funcionaria les informó a las reporteras que «partir de ahora los representantes de los medios deberán identificarse con el personal de seguridad en la Planta Baja y solo podrán ingresar a la sede administrativa acompañados de personal de la dirección de prensa siempre y cuando haya actividades convocadas o si un diputado confirma que existe una cita previa», explicó Morales en una nota publicada en la web de El Nacional.
De manera reiterada se han venido evidenciando limitaciones de acceso a la cobertura periodística en la sede del Palacio Federal Legislativo, donde se desarrollan las sesiones parlamentarias. Varios periodistas de la fuente han comentado a IPYS-Venezuela sobre las nuevas restricciones que ahora abarcan el trabajo de la prensa en el edificio administrativo de la Asamblea Nacional, ubicado a pocas cuadras del Capitolio.
En la nota escrita por Morales para la web, también, detallaba una serie de limitaciones que han sido recurrentes y que hacen más difícil el trabajo de la prensa en la Asamblea Nacional: «el proceso de acreditación de la prensa (en la AN) está retrasado desde enero y todas las credenciales están vencidas (…); los medios privados no pueden ingresar hasta que hayan ingresado los medios del Estado y haya iniciado la sesión (…); la sala de prensa donde deben aguardar a que los diputados suban a declarar. Luego de la toma de posesión del presidente Nicolás Maduro, se instaló un detector de metales en la entrada de los periodistas para incrementar la seguridad tras el incidente del espontáneo que se le abalanzó en pleno discurso (…)». Estos incidentes han sido reportados por IPYS-Venezuela, en diferentes alertas emitidas desde enero de 2013.
Respuesta política
En vista de la información que aportó la funcionaria de prensa de la Asamblea Nacional a las periodistas, en horas de la tarde, Maru Morales se comunicó vía telefónica con el Director de Prensa, Ricardo Durán a fin de consultarle sobre estas nuevas restricciones y utilizar sus declaraciones para una nota que publicaría al día siguiente en el periódico.
Morales explicó a IPYS-Venezuela que le realizó varias preguntas al funcionario y él le contestó que no le iba a ofrecer ninguna declaración. En su lugar, le daría una respuesta adecuada a lo que era Morales: «una operadora política». La reportera le preguntó que en qué consistía esa medida a la que se refería y Durán le contestó que él se encargaría de hacer una visita a los medios oficiales para hablar sobre lo que era y lo que hacía Morales. Además, Durán se dedicó a descalificar su trabajo reporteril, según lo comentado por la afectada.
Ese mismo día, fue publicada una nota informativa en la web de la Asamblea Nacional que refería: «Ricardo Durán, desmintió contundentemente, la información emitida por la periodista, Marú Morales, del Diario El Nacional, quien manifestó que existen ‘nuevas’ restricciones en el Parlamento. El comunicador denunció que Morales es una operadora política de la derecha para entorpecer los trabajos comunicacionales de la AN».
«Nosotros no tenemos ningún tipo de restricciones, ni en la sede administrativa de la Asamblea Nacional, ni tampoco en el Palacio Federal Legislativo. Simplemente, aquí existen normas que hay que respetar y que son inviolables; estas mismas normas forman parte de las reglas a seguir para el buen funcionamiento del Parlamento», explicaba Durán según la información de prensa.
Sobre la periodista, el funcionario dijo: «Marú Morales agrede sistemáticamente a los trabajadores y trabajadoras de la AN».
La nota, también, reseñó: «Nosotros descartamos esta nota del Diario El Nacional, y definitivamente, creemos que esto forma parte de ese grupo de periodistas que no asisten a la AN para buscar información, y mucho menos, para ejecutar su función periodística, todo lo contrario, van al Parlamento a entorpecer y a ejercer una posición -claramente- política», dijo Durán.
Durán manifestó: «esta es la sede administrativa del Parlamento, no es la sede de El Nacional, Globovisión, ni de El Universal (medios privados); y por lo tanto, hay unas normas que cumplir. Todos deben adaptarse a estas reglas, que también tienen que ver con normas de seguridad».
Estas declaraciones configuran un uso abusivo del poder estatal debido a que están a desacreditar el trabajo de Maru Morales por parte de un funcionario público. Además, esta situación evidencia la agudización de limitaciones arbitrarias para la cobertura de la prensa en las actividades parlamentarias, las cuales son de interés público. Se observa una violación a los artículos 57 y 58 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que garantizan la libertad de expresión e información, sin ningún tipo limitaciones, amenazas, riesgos ni presiones.